La semana pasada, un jurado de Florida otorgó más de $2.8 millones en compensación por las lesiones de cuello y espalda que sufrió Chantelle Alexander, una exjugadora de fútbol universitario, en un accidente automovilístico ocurrido en 2019. Alexander v. Rojas, 2019-CA-028093.
El jueves pasado, el veredicto, que incluye $2 millones por el dolor y sufrimiento de Chantelle Alexander, concluyó un juicio de tres días centrado únicamente en los daños en la Corte del 11º Circuito del estado de Florida por la colisión por alcance que, según Alexander, le dejó un dolor de por vida.
Alexander tenía 19 años y jugaba al fútbol en el ASA College de Miami en febrero de 2019 cuando el automóvil en el que viajaba como pasajera fue golpeado por una camioneta conducida por Ariecel Rojas. Alexander sostiene que el accidente le causó lesiones que requieren tratamiento quiropráctico y control del dolor, entre otros problemas.
Los demandados, incluidos Rojas; el propietario del camión, Antonio Pérez; y el empleador de ambos en ese momento, US Fire Systems, Inc., admitieron su culpa, por lo que el juicio se centró en las consecuencias a largo plazo, si las hubiera, del accidente.
La defensa argumentó que las lesiones de Alexander no eran tan graves como ella afirmaba. Durante los argumentos finales del jueves, Thomas McCausland de Conroy Simberg recordó a los miembros del jurado un video de vigilancia que mostraba a Alexander jugando al fútbol de manera competitiva en la temporada siguiente al accidente. Y sostuvo que ese video refutaba las afirmaciones de Alexander sobre sus lesiones.
El abogado de Alexander, Keith Mitnik de Morgan & Morgan, reconoció que Alexander había jugado al fútbol en la temporada siguiente al accidente. Sin embargo, argumentó que las pruebas demostraban que sus lesiones le habían quitado la capacidad de jugar sin dolor y al mismo nivel que lo hacía antes del accidente. Y sostuvo que las afirmaciones de la defensa de que Alexander se recuperó en seis semanas después del accidente eran contrarrestadas por las pruebas médicas de los demandantes y el testimonio de la propia Alexander detallando su dolor y las limitaciones que le impuso en su vida.
CVN se ha puesto en contacto con los abogados de ambas partes y actualizará este artículo con sus comentarios.
