En una trágica noche en Pomona, a solo un día de cumplir 13 años, un niño de 12 años perdió la vida en un violento accidente de coche. El accidente ocurrió temprano el sábado por la mañana cuando el padre del niño, quien posiblemente estaba conduciendo bajo la influencia del alcohol, perdió el control de su vehículo y chocó en la autopista 57.
La familia y amigos, llenos de dolor, se reunieron el domingo cerca del lugar del accidente en la Autopista 57 para rezar, cantar feliz cumpleaños y lamentar la pérdida de Abel Vázquez.
“Mi hermana ha vivido la peor pesadilla de todo padre, tener que enterrar a su propio hijo”, dijo César Sánchez, tío y padrino de la víctima, a Erin Myers de KTLA.
El niño de 12 años y su padre regresaban de un concierto en celebración de su próximo cumpleaños cuando su padre chocó contra un terraplén en una rampa de entrada.
“Él hizo hincapié en que su padre solo obtuviera dos boletos porque quería pasar tiempo de calidad con él”, explicó Sánchez.
Abel sufrió graves lesiones en el accidente y fue llevado de urgencia al hospital, donde falleció más tarde.
La familia del niño, ya abrumada por el dolor, ahora se está enfrentando a la posibilidad de que el padre de Abel haya tenido un papel en su muerte.
“Si el alcohol u otras sustancias jugaron un papel en este trágico evento, sentimos firmemente que debería ser procesado en toda la extensión de la ley”, dijo el tío de Abel.
La familia le contó a KTLA que Abel era conocido por hacer reír a todos y amaba bailar y jugar béisbol. Sus equipos favoritos eran los Dallas Cowboys, Los Angeles Lakers y Los Angeles Dodgers.
Funcionarios de la Patrulla de Carreteras de California confirmaron que se hizo un arresto en el lugar del accidente, pero aún no han anunciado los cargos que enfrenta la persona.
