Fuego en Castaic, Los Angeles, California
Dos alguaciles del condado de Los Ángeles sufrieron quemaduras de tercer grado el martes por la mañana después de que se desatara un incendio en un remolque utilizado como un campo de tiro móvil en Castaic, según informaron las autoridades.
El incendio comenzó alrededor de las 9:30 a.m. en el remolque ubicado junto a la cárcel de hombres en el Centro de Detención Pitchess. El centro se utiliza para la formación de las fuerzas del orden, pero no tiene relación con la cárcel, según indicó Nicole Nishida, gerente de comunicaciones del Departamento del Sheriff.
Dos alguaciles se encontraban dentro del remolque de 53 pies cuando se desató el fuego, informaron las autoridades del sheriff. Uno de ellos estaba realizando un examen de recertificación requerido por el departamento, y el otro, el maestro de tiro, estaba supervisando.
Ambos fueron inicialmente llevados al Hospital Henry Mayo Newhall, donde fueron catalogados en condición crítica pero estable. Más tarde, fueron trasladados al Centro Médico General de Los Ángeles “para recibir tratamiento médico adicional”, según indicaron las autoridades del sheriff.
Otros campos de tiro en todo el condado de Los Ángeles fueron cerrados el martes mientras las autoridades trabajaban para determinar cómo se originó el incendio. Parte de la investigación incluirá entrevistar a los alguaciles, pero las autoridades señalaron que la atención médica era la principal prioridad.
“Es extremadamente temprano en la investigación para determinar la causa de este incendio”, dijo el sheriff Robert Luna durante una conferencia de prensa por la tarde. “Necesitamos saber por qué sucedió y llegar al fondo del asunto para evitar que vuelva a ocurrir”.
No es la primera vez que un campo de tiro móvil del Departamento del Sheriff se incendia. Según informes de medios locales, los bomberos apagaron un remolque en llamas en Marina del Rey en 2019. En ese momento no se informaron heridos, y un funcionario del departamento no respondió el martes a una solicitud de más información sobre lo que causó ese incendio.
El equipo de incendios provocados y explosivos del departamento investigará el incendio del martes, dijo Luna, pero solo después de que quede claro que la munición dentro del campo de tiro móvil se ha enfriado.
El incendio continuó ardiendo horas después de que se desatara el fuego mientras los equipos del Departamento de Bomberos del Condado de Los Ángeles seguían apagando las llamas en el interior. Los bomberos lograron evitar que el fuego se propagara a un edificio y otro remolque cercanos, según el subjefe de bomberos Thomas Ewell.
Las autoridades del sheriff dijeron que los dos alguaciles eran las únicas personas en el remolque cuando comenzó el incendio. Aunque ambos sufrieron quemaduras críticas, se espera que sobrevivan, según informaron las autoridades.
El personal médico en el hospital no reveló detalles sobre la condición de los alguaciles debido a las leyes de privacidad, pero indicó que sus lesiones eran consistentes con un incendio.
Luna se negó a identificar a la pareja, señalando que el personal del sheriff aún está contactando a los familiares, pero dijo que ambos son miembros veteranos del departamento. Uno ha servido en el condado de Los Ángeles durante 21 años y trabaja en la cárcel; el otro está asignado al juzgado de Sylmar y ha estado en el departamento durante 17 años, según Luna.
Thomas Ferguson, vicepresidente de la Asociación de Alguaciles Deputados de Los Ángeles, dijo que el sindicato estaba “entristecido al enterarse de que uno o más de nuestros miembros resultaron gravemente heridos en un accidente de entrenamiento en un campo de tiro móvil” y que la organización estaba trabajando para apoyar a los heridos y sus familias.
“Hasta ahora, solo contamos con información preliminar, y el enfoque está en brindar atención médica a los heridos y salvaguardar el lugar del accidente”, continuó Ferguson. “En todas las situaciones en las que un miembro del departamento o un miembro del público resulta herido o muerto en operaciones o entrenamientos policiales, ALADS insistirá en una investigación completa. El departamento ha suspendido todo el entrenamiento en campos de tiro móviles. Nuestros corazones y pensamientos están con las víctimas”.
Luna no pudo responder si los informes iniciales sobre una explosión eran precisos y dijo que esos detalles formarán parte de la investigación sobre el incendio. Los investigadores están examinando el sistema de ventilación del remolque y si estaba apagado, algo que podría haber provocado una falta de circulación de aire y desencadenado el incendio.
“Honestamente, todavía no sabemos en este momento todo lo que sucedió. Nuestros investigadores de incendios provocados investigarán todo de la A a la Z, y lo resolveremos”, dijo Luna. “Al final del día, tenemos a dos alguaciles con lesiones significativas. No queremos que esto vuelva a ocurrir”.
Emanuel Kapelsohn, un experto en armas de fuego y uso de la fuerza que dirige la firma consultora Peregrine Corp., dijo que los campos de tiro móviles son comúnmente utilizados por las agencias de aplicación de la ley en todo el país.
“Hay muchos tipos de campos de tiro en remolques”, dijo. “Algunos se utilizan solo para simulaciones con sistemas electrónicos donde se disparan rayos láser u otros proyectiles. Algunos se utilizan para munición regular”.
Este último requiere una buena ventilación, agregó.
A diferencia de los campos de tiro tradicionales, Kapelsohn dijo que los campos de tiro móviles tienen la ventaja de ofrecer flexibilidad en las ubicaciones de entrenamiento, ya que los remolques se pueden mover con facilidad. También ofrecen la capacidad de disparar armas en una variedad de condiciones de iluminación, lo que permite a las fuerzas del orden practicar disparos en condiciones de poca luz durante el día.
El incendio del martes se produce semanas después de que Los Angeles Times publicara una investigación sobre la seguridad contra incendios en otra de las instalaciones del condado, la deteriorada cárcel conocida como Men’s Central Jail en el centro de la ciudad.
Durante décadas, según se informó, los hombres detenidos allí han usado baterías y navajas para provocar incendios y calentar alimentos, hervir agua, fumar drogas o mantenerse calientes.
Aunque la instalación envejecida se construyó según el código en 1963, ese código no requería detectores de humo o rociadores en las áreas de alojamiento de los reclusos. Sin alarmas automáticas, depende de los carceleros detectar incendios y activar manualmente una alarma dentro de una de las cabinas de los alguaciles.
“Todas nuestras cárceles se adhieren tanto a las regulaciones del jefe de bomberos como a las pautas de la Junta de Regulación y Corrección Comunitaria del Estado relacionadas con la seguridad contra incendios”, dijo el subjefe del alguacil, Sergio Aloma, el mes pasado. “Sin embargo, seguimos evaluando las mejores prácticas relacionadas con la seguridad de las instalaciones y estamos abiertos a nuevas tecnologías emergentes que puedan hacer nuestras instalaciones más seguras”.
No quedó claro de inmediato qué medidas de seguridad contra incendios estaban en su lugar en los remolques de tiro donde ocurrió el incendio del martes.
Pitchess Detention Center, The Old Road, Castaic, CA, USA
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