Una colisión entre un jet ski y un barco en el Río Manatee de Florida terminó en tragedia la semana pasada.
El incidente ocurrió el sábado cuando un jet ski operado por un residente de 45 años de edad y no identificado de Palmetto, Florida, chocó contra un barco en el que iban dos hermanos adolescentes. Según FOX-13, el accidente dejó a Hunter Ganey, de 14 años, muerto y a su hermano James Ganey, de 17 años, en estado crítico.
Un pariente de la familia, Kenny Shewbridge, le dijo a WFTS-TV que los chicos “amaban pescar” en el Río Manatee y afirmó que el barco estaba anclado cuando ocurrió la tragedia.
“Los jet skis vinieron rápido doblando la esquina, no tuvieron tiempo para reaccionar y chocaron contra el barco”, dijo Shewbridge. El medio de comunicación informa que James permanece hospitalizado en el Hospital General de Tampa en un coma inducido médicamente, pero “se espera que sobreviva”.
“Él todavía no sabe qué sucedió, que ha tenido un accidente o que su hermano ya no está con él, todavía no sabemos cuál es el pronóstico”, dijo Shewbridge a WFTS-TV sobre la condición de James.
Mientras el caso sigue siendo investigado por la Oficina del Sheriff del Condado de Manatee y la Comisión de Conservación de Vida Silvestre de Florida, la FWC extendió sus condolencias a la familia de la víctima en un comunicado compartido con PEOPLE.
“La FWC expresa sus más profundas condolencias a las familias afectadas por este trágico evento. Esta pérdida de vida se siente profundamente en nuestra agencia y en toda la comunidad del Condado de Manatee. Nuestros pensamientos están con las víctimas, sus familiares y todos aquellos afectados durante este momento extremadamente difícil”, decía el comunicado.
“Nuestra investigación activa, en colaboración con la Oficina del Sheriff del Condado de Manatee, está en curso. Seguimos comprometidos en comprender la secuencia completa de eventos que condujeron a este devastador incidente”, continuó la FWC. “Expresamos nuestro sincero agradecimiento a la Oficina del Sheriff del Condado de Manatee, a los servicios de emergencia y al personal médico que han proporcionado una respuesta rápida y asistencia continua durante esta situación”.
Se creó una campaña de GoFundMe para ayudar a la familia de los hermanos con los gastos del funeral y el cuidado de James. La campaña ha superado su objetivo de $25,000, dejando a Shewbridge con emociones “agridulces”.
“Es agridulce, sabes, obviamente no queremos que la comunidad tenga que ayudar de esta manera, pero ver cómo se unen y personas que no conoces”, dijo a WFTS-TV. “Quiero decir, miré allí, y había personas de Maine y Nueva York donando. Es muy reconfortante ver cómo las personas se unen una vez más. Esto también es la pesadilla de todos los padres; los padres pueden simpatizar”.
