El juicio de Gwyneth Paltrow por su colisión con Terry Sanderson en una estación de esquí de Utah en 2016 se ha convertido en el caso de celebridad más grande desde Johnny Depp y Amber Heard. El caso ha llamado la atención mundial, generando debate sobre la carga de la fama y las reglas de etiqueta en las pistas de esquí. Los abogados de ambos lados han destacado y minimizado los lujosos estilos de vida de Paltrow y Sanderson. La defensa de Paltrow ha tratado de representar a Sanderson como un hombre mayor y enojado que sigue viajando internacionalmente y degustando vino después del choque. Por su parte, los abogados de Sanderson han cuestionado a Paltrow acerca de su cuenta de $8,890 para contratar a cuatro instructores de esquí privados para sus hijos después del choque, así como su decisión de dejar la pendiente después del accidente para recibir un masaje.
El juicio ha generado una fábrica de memes en las redes sociales, desde imágenes de Paltrow entrando y saliendo de la corte hasta comparaciones con la serie de HBO “The White Lotus”. Además, el juicio ha puesto a Park City, Utah en el mapa, el pueblo minero de plata que se convirtió en un lujoso centro turístico donde Paltrow y Sanderson chocaron. El jurado está compuesto por residentes del condado de Summit, donde el precio promedio de una casa vendida el mes pasado fue de $1.3 millones, y son menos religiosos que la mayoría de la población de Utah.
En conclusión, el juicio de Paltrow ha sido un gran atractivo para los medios de comunicación y el público en general, pero la pregunta sigue en el aire: ¿quién tendrá la última palabra?
A medida que los abogados se preparan para los alegatos finales, el juicio ha destacado la carga de la fama y cómo se usa en los casos judiciales. Los abogados de Sanderson han tratado de representar a Paltrow como una persona torpe, desconectada y evadiendo la responsabilidad, comparando su demanda de $1 con la de Taylor Swift en una demanda en 2017. Por otro lado, la defensa de Paltrow ha llamado al caso un intento de explotar su fama y ha sugerido que está siendo vulnerada por demandas frívolas e injustas.
El caso también ha sido impactante por la ausencia de un video de casco que podría haber capturado el choque. La hija de Sanderson declaró que un correo electrónico enviado el día del accidente que hacía referencia a un GoPro no implicaba que existiera una grabación. Sin embargo, los fiscales encontraron y enviaron un enlace de chat en el que se discutía el choque, pero no había ningún video que mostrara lo sucedido.
A pesar de los altos costos legales, los expertos en colisiones y los ingenieros biomecánicos que han testificado en el caso, el misterio del video perdido y las extravagantes vidas de Paltrow y Sanderson, este caso ha demostrado ser un gran atractivo para el público. Y aunque el veredicto final sigue siendo incierto, es claro que el juicio ha demostrado la importancia del respeto a las reglas de esquí, independientemente de la fama y el estatus socioeconómico.
