Oficiales de la Patrulla de Carreteras de California se encontraban en persecución de un sospechoso en el Este de Los Ángeles cuando se produjo un violento choque, poniendo fin abruptamente a la persecución.
Informan que estaban siguiendo al conductor por presunta conducción temeraria y, en momentos, los oficiales indican que el sospechoso avanzaba por la autopista 210 a velocidades de hasta 120 millas por hora mientras huía.
Con SkyCal sobrevolando, se pudo observar al sospechoso conduciendo a aproximadamente 80 millas por hora en la autopista 710 sin las luces encendidas.
Al atravesar la intersección de S. Alameda Street y Firestone Boulevard en el área de South Gate, el vehículo impactó contra un conductor no involucrado, perdiendo el control de su automóvil y atravesando un pequeño muro de ladrillos antes de chocar contra un automóvil estacionado fuera de un 7-Eleven.
Tras el choque, tres sospechosos salieron del automóvil, un sedán Infiniti, y huyeron del área a pie.
No se disponía de información sobre el estado del conductor dentro del automóvil con el que el sospechoso chocó primero o si alguna otra persona dentro del vehículo del sospechoso resultó herida.
Varios espectadores de negocios cercanos salieron después del choque y comenzaron a grabar las secuelas del violento choque. Una de las llantas del automóvil pareció reventarse mientras algunos de los civiles observaban, lo que les hizo dispersarse.
Después de casi 10 minutos, los oficiales localizaron a uno de los sospechosos, a quien creían era el conductor, a varias cuadras del lugar de la colisión. Fue detenido después de acostarse boca abajo en la acera en Grape Street y Firestone Boulevard.
A pesar de recibir información de que había un niño dentro del automóvil cuando ocurrió el choque, KCAL News ha sabido que en algún momento durante la persecución, el sospechoso se detuvo y dejó al niño en una casa en Rancho Dominguez. Regresaron a su automóvil con la silla de coche en la que estaba sentado el niño, lo que llevó a los oficiales a creer que podría haber estado todavía dentro.
