Una dueña de negocio en California fue tiroteada y asesinada después de una disputa sobre una bandera de Orgullo LGBTQ+ que estaba expuesta afuera de su tienda, informaron las autoridades. Oficiales de la oficina del sheriff del condado de San Bernardino indicaron que Laura Ann Carleton, de 66 años, fue declarada muerta en el lugar del tiroteo la noche del viernes.
De acuerdo con los informes, durante una confrontación inicial en la tienda de ropa de Carleton, un sospechoso masculino “realizó varios comentarios despectivos sobre una bandera arcoíris que estaba afuera de la tienda antes de dispararle a Carleton”. Luego huyó del lugar.
Los agentes lograron localizar al sospechoso, quien estaba armado, y fue abatido después de un enfrentamiento con los oficiales. Hasta el domingo, el hombre no había sido identificado.
Carleton, quien prefería que la llamaran “Lauri”, deja atrás a su esposo y nueve hijos en una familia compuesta. Ella era dueña de la tienda de ropa Mag.Pi en Cedar Glen, una comunidad no incorporada en las montañas de San Bernardino, aproximadamente a 100 km al este de Los Ángeles.
Un grupo LGBTQ+ en Lake Arrowhead, cercano al lugar, señaló que Carleton no se identificaba como miembro de la comunidad LGBTQ+, pero dedicaba tiempo a ayudar y abogar por todos. El grupo declaró que ella defendía las banderas de Orgullo colocadas frente a su tienda la noche del tiroteo.
Las redes sociales se llenaron de muestras de apoyo, con comentarios en las cuentas de la tienda expresando conmoción y tristeza, muchos de ellos acompañados de emojis de la bandera arcoíris.
Entre los que rindieron homenaje se encontraba el director de “Damas en Guerra”, Paul Feig, quien recordó a Carleton como una “maravillosa amiga”. “Todos estamos devastados por su esposo Bort y su familia, y por la comunidad LGBTQ+, para quienes Lauri fue un verdadero aliado”, escribió en Instagram, añadiendo: “Esta intolerancia debe terminar. Cualquier persona que use lenguaje odioso contra la comunidad LGBTQ+ debe darse cuenta de que sus palabras importan, que sus palabras pueden inspirar violencia contra personas amorosas e inocentes. Sigamos avanzando con tolerancia y amor. No dejemos que la trágica muerte de Lauri sea en vano”.
En los últimos años, varias agencias policiales en varios estados han investigado la destrucción de banderas de Orgullo arcoíris como posibles crímenes de odio.
